Nos hemos dado cuenta de que en muchas ocasiones se usan los términos cepillar y peinar como si fueran sinónimos cuando, en realidad, son dos pasos diferentes pero igual de importantes en la rutina de cuidado del cabello. Hoy queremos ayudarte a entender en qué consiste cada una de estas acciones. 

Diferencias entre cepillar y peinar

La principal diferencia entre cepillar y peinar es el objetivo de cada acción:

Cepillar se refiere a usar un cepillo para desenredar el cabello, mientras que peinar implica usar un peine, con el objetivo de dar forma y estilo a tu pelo

Cierto es que en cabellos cortos puedes prescindir del peine y darle forma con las manos.

Ambas acciones forman parte de nuestra rutina diaria, pero se realizan de manera diferente y con herramientas distintas. 

Cepillar el pelo

El objetivo de cepillar el pelo es desenredar para que nuestro pelo esté sano: quitamos los nudos que se hayan generado, evitamos que se ropa y mejoramos su aspecto y suavidad. Es importante elegir un cepillo adecuado para el tipo de cabello que tengas y cepillar con suavidad sin tirar ni dañar el cabello. 

Empieza por las puntas y poco a poco vete subiendo hasta llegar a la raíz. Esto se hace así porque si empezáramos el cepillado desde la raíz iríamos bajando los nudos y se acumularían en medios y puntos del cabello, ahí vendrían los temidos tirones y podríamos romper el cabello. 

Es recomendable cepillar el pelo a la mañana y a la noche y hacerlo con el pelo húmedo, después de aplicar tu acondicionador favorito. 

Por cierto, un cepillado regular ayuda a estimular el cuero cabelludo y a mejorar la circulación sanguínea en la zona, lo que puede promover el crecimiento del cabello y mantenerlo saludable. En cabellos medios cortos utilizando un cepillo adecuado podemos hacer frente a las temidas formas que coge el cabello en la zona cercana a la raíz. 

Peinar el cabello

Cuando has terminado toda tu rutina de cuidado de pelo llega el momento de darle la forma que tú quieras: es el momento de peinar. 

Peinar el cabello implica separarlo en secciones y pasar el peine a través de cada una de ellas para asegurarse de que esté desenredado y, también, en su lugar. Podemos incorporar ahora productos como gel o espuma para mantener o fijar el pelo donde queramos y darle así, a nuestro cabello, el estilo que buscamos. 

Si tu cabello es largo no olvides que con un peine de púas anchas podrás desenredar con mayor facilidad la melena; siempre después de aplicar acondicionador o mascarilla y, con el producto en el cabello, pasa el peine de puntas a medios y raíz para evitar la formación de nudos. Es importante que no sea de raíz a puntas desde el principio porque esto hará que se formen los nudos. Una vez desenredado puedes aclarar la melena.